Muchas veces me han preguntado esto, y mi respuesta es un rotundo SÍ.  Para mí, todos debiéramos tener un Coach, de lo contrario, podríamos estar limitando el éxito de nuestra carrera.  Esto se debe a que los Coach te ayudan a identificar y centrarte en lo que es importante, lo que acelera tu éxito. Según el sitio www.coaches.com , buenos Coaches:

Crean un ambiente seguro en el que las personas se vean más claramente;

Te ayudan a identificar brechas entre dónde está el cliente y dónde necesita o quiere estar;

Desafía a generar más cambios intencionales de pensamiento, acción y comportamientos de los que el cliente se hubiera pedido a sí mismo;

Guían la construcción de la estructura, responsabilidad y el apoyo necesario para garantizar un compromiso sostenido en el tiempo.

Los atletas exitosos obviamente entienden el poder de tener un entrenador (Coach). La Estrategia de Entrenamiento del Reino Unido describe el papel del entrenador deportivo como uno que “permite al atleta alcanzar niveles de rendimiento en un grado que puede no haber sido posible si se dejara a sus propios esfuerzos”.  Las empresas innovadoras entienden que el Coaching puede ayudar a los profesionales con espíritu de superación a aumentar su rendimiento en el trabajo. Por lo tanto, estas empresas invierten en Coaching para sus principales líderes y personas consideradas “altos potenciales”. Claramente, después de muchos años de experiencia, los ejecutivos de empresas también saben que el Coaching no es un trabajo solo para ejecutivos, también es válido para distintos niveles en la corporación.

El Coaching también tiene un impacto en el desempeño financiero de una organización. Según un estudio de ICF y HCI, el 60% de los encuestados de organizaciones con fuertes culturas de Coaching informan que sus ingresos están por encima del promedio, en comparación con su grupo de pares.

Cuando se trata de construir tu marca personal, un Coach es un recurso poderoso que puede ayudarte a salir de tu propio camino, destacarte y tomar medidas para lograr las cosas que son realmente importantes para ti. Tu Coach puede ayudarte a:

• Aclarar tus objetivos. Puede que tu empresa te lleva hacia un lado y tu jefe hacia otro dando diferentes consejos basados ​​en otros criterios. Tu Coach te ayudará a determinar qué es lo realmente importante para ti.
• Identificar puntos ciegos. Descubre lo que no sabes con tu Coach.
• Ser responsable (accountable). Tu Coach te ayudará a mantenerte protagonista de tu vida.
• Centrar tus esfuerzos de desarrollo. Conoce mejor la explotación de tu FODA personal con tu Coach.
• Obtener una ventaja competitiva. Un Coach te ayudará a llegar de un punto A al B más rápido de lo que podrías por tu cuenta.
• Adquirir habilidades de liderazgo. Los Coach modelan habilidades que son valiosas para los líderes de hoy.
• Aumentar el compromiso. Un estudio de Gallup reveló que solo el 13% de los empleados en todo el mundo están comprometidos en el trabajo. Sin embargo, según un estudio realizado por HCI e ICF, el Coaching se correlaciona con un mayor compromiso de los empleados; El 65% de los empleados de compañías con fuertes culturas de Coaching se calificaron como altamente comprometidos.
• Sentirte más feliz. Debido a que los Coach te ayudan a identificar y alinear tus valores, crear un enfoque, reducir el desorden y tolerancias claras, en consecuencia, esto te ayudará a aumentar tu satisfacción profesional.

En pocas palabras, un Coach te ayudará a avivar tu éxito. ¿Cuánto valor tiene eso para ti?

Incluso puedes lograr que tu empresa pague la factura. Habla con tu gerente y/o tu área de desarrollo de talento. Es posible que estén dispuestos a invertir en Coaching para ti, en medida que lo justifiques. Además, algunos programas de desarrollo de liderazgo vienen con componentes de entrenamiento, así que regístrate para aquellos que puedas calificar. Es una excelente forma de experimentar el Coaching.

Y si tu empresa decide no pagar por tu Coaching, realiza tú mismo la inversión. Pagarás en claridad, felicidad y mayor éxito. Piensa en el Coaching como una inversión, no como un gasto.